jueves, septiembre 01, 2016

Miedo...

Si, miedo a escribirles lo que paso... Miedo a que a ustedes les pase algo... Por eso no había querido escribir, para no hacerlo real.
A veces es mas fácil no hablar, ni pensar las cosas para no hacerlas reales. Pero creo, humildemente, que eso es peor... Por que uno acumula tanto, tanto miedo, tanta rabia, que al final se va metiendo en un hoyo negro, oscuro y profundo que cuesta mucho salir...
Que les puedo decir de Benjamín que no les hayan dicho ya... Fue un niño alegre, hasta durante su enfermedad, que luchó, y puta que lucho junto a su familia. Que es un ángel en el cielo que cuida a sus padres y a sus hermanos mas que a nadie en el mundo...
El otro día, conversando con una compañera de trabajo, dijo algo super cierto, estos niños remueven hasta la gente que no conocen... Por que no solo los que conocimos al Benja hablamos del... Si no que el circulo de todos nuestros conocidos hablo de esto, lo pensó, lo amo, le mando fuerza y energía a su familia, todo esto sin conocerlos...
Yo, encuentro que es injusto... No existen palabras para describirles la rabia y la impotencia que tengo contra la vida... Y no puedo tampoco decirlas ya que casi que atentaría contra la vida misma.

La lección que nos deja esta y cualquier partida de cualquier persona, aunque no la conozcamos. es que tenemos que rodearnos de personas que nos quieran y querer con el alma... Aunque suframos, aunque nos rompan el corazón... Siempre tenemos que dar lo mejor de nosotras para estar tranquilas y en paz sabiendo que dimos lo que pudimos... Así logramos crecer y aprender...

Yo, puedo decirles a ustedes tres que los amo... Que no importa lo que nos depare el futuro por que se que si estoy con ustedes saldremos adelante...

Besos hasta el alma,
Mamá.